En esta página encontrarás las respuestas a las preguntas más comunes sobre el IVA en Malta, cómo calcularlo, qué impuestos están exentos y cuáles son los tipos de reducidos.
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¿Qué es el IVA?
El IVA es un impuesto indirecto que grava el valor añadido que se le va dando a un producto o servicio en cada fase de producción o comercialización, hasta llegar al consumidor final. El IVA se aplica sobre el precio neto (sin impuestos) de los bienes y servicios.
¿Cómo se calcula el IVA?
Para calcular el IVA se debe aplicar la tasa o alícuota correspondiente al tipo de bien o servicio. Hay tres tasas de IVA en Malta:
- IVA general: 18%. Se aplica a la mayoría de los bienes y servicios.
- IVA reducido: 7%, 5% o 0%. Se aplica a ciertos bienes y servicios considerados básicos o exentos, como alojamiento turístico, alimentos, medicinas, libros, periódicos, transporte público, entre otros.
- IVA referencial: 0%. Se aplica a ciertos bienes y servicios considerados no sujetos o no imponibles, como exportaciones, operaciones intracomunitarias, servicios financieros, entre otros.
Para obtener el precio final con IVA se debe multiplicar el precio neto por la tasa más uno. Por ejemplo, si un producto tiene un precio neto de 100 euros y se le aplica un IVA del 18%, el precio final con IVA será:
100 x (1 + 0,18) = 118 euros
Para obtener el precio neto sin IVA se debe dividir el precio final por la tasa más uno. Por ejemplo, si un producto tiene un precio final de 118 euros y se le aplicó un IVA del 18%, el precio neto sin IVA será:
118 / (1 + 0,18) = 100 euros
¿Qué impuestos están exentos de IVA?
Hay algunas actividades que están exentas de IVA por ley. Algunas de ellas son:
- Venta de productos alimenticios básicos como pan, leche, huevos, carne, frutas y verduras.
- Venta de productos medicinales y farmacéuticos como medicamentos con receta médica, vacunas e insumos hospitalarios.
- Venta de productos educativos como libros, textos y útiles escolares.
- Venta de productos culturales como periódicos, revistas, obras de arte originales y entradas a espectáculos públicos.
- Prestación de servicios de salud como consultas médicas, odontológicas, psicológicas, exámenes de laboratorio y hospitalización.
- Prestación de servicios educativos como matrículas, mensualidades y cursos impartidos por instituciones públicas o privadas autorizadas.
- Prestación de servicios públicos como agua potable, electricidad, gas, recolección de basura y alcantarillado.
- Prestación de servicios de transporte público como buses, taxis, metro y trenes.
Estas actividades no deben incluir el IVA en sus facturas ni declararlo ante la DGI.
¿Qué impuestos son reducidos?
Hay algunas actividades que tienen una tasa de IVA reducida por ley. Algunas de ellas son:
- Venta de productos agropecuarios, pesqueros y acuícolas que no hayan sido procesados industrialmente.
- Venta de productos electrónicos como computadoras, tabletas, celulares y otros dispositivos similares.
- Venta de productos ecológicos como paneles solares, calentadores solares y otros equipos que aprovechen las energías renovables.
- Prestación de servicios turísticos como alojamiento en hoteles, hostales y otros establecimientos similares.
- Prestación de servicios financieros como intereses, comisiones y otros cargos por operaciones bancarias o bursátiles.
- Prestación de servicios profesionales como abogados, contadores, ingenieros, arquitectos y otros que requieran colegiación o certificación.
Estas actividades deben incluir el IVA reducido en sus facturas y declararlo ante la DGI.
¿Cómo se declara y se paga el IVA?
Los Responsables Inscriptos en el IVA deben presentar una declaración jurada trimestral ante la DGI, donde informan el IVA generado por sus ventas (débito fiscal) y el IVA pagado por sus compras (crédito fiscal). La diferencia entre ambos es el saldo a pagar o a favor del contribuyente.
La declaración jurada se presenta mediante el servicio web VAT Online Services de la DGI, utilizando el formulario VAT Return. El vencimiento para presentar y pagar el IVA es entre los días 15 y 20 del mes siguiente al trimestre fiscal declarado, según la terminación del VAT Number del contribuyente.
El pago se puede realizar mediante transferencia electrónica de fondos, débito automático, volante electrónico de pago (VEP) o en efectivo en entidades bancarias habilitadas.
Régimen Non-Dom para residentes fiscales en Malta
Los residentes fiscales en Malta pueden optar por el régimen Non-Dom, que les permite tributar solo por las rentas extranjeras remitidas a Malta y no por las rentas de fuente extranjera.
Impuestos para empresas residentes y no residentes
Las empresas residentes y no residentes están sujetas a impuestos al tipo del 35%. Sin embargo, los accionistas tienen derecho a reclamar la devolución del impuesto pagado en Malta sobre algunos de los dividendos que reciben de las empresas maltesas. La tasa impositiva efectiva para accionistas no residentes y no domiciliados es del 5%.
Utilización de Luxemburgo y Malta por empresas españolas
Algunas empresas españolas utilizan Luxemburgo y Malta para tributar menos del 3% por su negocio exterior, mediante filiales sin apenas trabajadores que sirven para canalizar su actividad hacia países de fiscalidad más baja.
El IVA (Impuesto al Valor Añadido) es un impuesto que se aplica al consumo de bienes y servicios en Malta. Los consumidores finales son los que pagan este impuesto dentro del precio de los productos y servicios que adquieren. Los comerciantes y las personas alcanzadas por el impuesto (Responsables Inscriptos) deben discriminar el IVA al momento de la venta de sus productos o servicios, declararlo ante la DGI y pagar el impuesto correspondiente.